De vuelta a la Tierra Media

Nueve años han pasado desde que el director Neo Zelandez Peter Jackson concluyo su épica trilogía basada en las novelas de fantasía de JRR Tolkien, "El Señor de los Anillos".

En el transcurso de 2007 Jackson inicio platicas con los estudios que le ayudaron en la produccion y distribución de su trilogía para adaptar la novela de Tolkien que era el preludio a la épica saga titulado "El Hobbit", y fue en el transcurso de 2008 que una interesante noticia se daba, el mexicano Guillermo del Toro sería el encargado de dirigir esta novela la cual se dividiría en dos partes según lo planeado.

Como fue avanzado el tiempo de preproducción, la producción se fue encontrado con baches creativos, de presupuesto e incluso de producción. Del Toro abandonaba la silla de director tomando solo la de productor por los retrasos que se comenzaron a suscitar y para que al final de cuentas Jackson fueran aquel que nos lleve de vuelta a Tierra Media. Y quien mejor que el para hacerlo.

A pocos meses de estrenarse "El Hobbit: Un Viaje Inesperado" el director anunciaba que la película sería dividía en tres, y no en dos partes como se había anticipado, justificando esta división que da pie a una nueva trilogía, "nutriendo" el universo con apéndices y anexos literarios que el autor de la obra habría escrito para la novela. Pero, ¿que tan buena decisión será ante una novela escrita para niños y que no sobrepasa las 300 páginas?

La primera parte de esta trilogía no le pide nada a las interiores e incluso las supera en producción y efectos especiales, la película por si sola es un deleite visual, el equipo de WETA demuestra su talento que les caracteriza.

Los diseños de producción son esta vez mas detallados y bellos al ojo del espectador, desde los campos abiertos de Nueva Zelanda, los escenarios como Rivendell y Erebor, los bosques y la nostalgia que provoca regresar a Bolsón Cerrado ya vale el precio del boleto.

Jackson decide filmar esta vez con tecnología HFR 3D, lo cual significa que el espectador en primera instancia ahora tiene más formatos de donde elegir (bastante complicado ir al cine ya en estos días) y ahora con esta tecnología gracias a que ahora el espectador recibe más cuadros por segundo para sus ojos, antes 24 el formato estándar, ahora con 48 que dan tal realismo a la proyección con una nítida imagen.

A su vez, la música de Howard Shore nos lleva de vuelta a la Tierra Media retomando temas de la trilogía pasada que resultan en una nostalgia inevitable.

Pero mi problema con El Hobbit sabia que no seria su diseño de producción, efectos especiales y música, lo que en verdad me preocupaba era la adaptación de la novela al guión, y pese a que es notable la forma en que Fran Walsh, Philippa Boyens, Jackson y Del Toro hicieron la adaptación, lamentablemente la división que se ha planteado le pesa al metraje del filme y al ritmo narrativo.

La película se toma mucho tiempo en arrancar, y a pesar que la escena de Bolsón Cerrado es divertida, se toma demasiado tiempo en introducción de personajes que a lo largo de la película poco sobresalen, incluyendo al magnifico Martin Freeman como Bilbo que se siente desperdiciado. Durante el desarrollo narrativo nos vemos inmersos en una búsqueda que parece eterna y que pesa porque sabemos que tardara en terminar cuando no debería ser tan lenta, cuando la aventura no debería ser tan tediosa.

El primer y el segundo acto del film son lánguidos, flojos en ritmo pero es cuando llegamos al tercer acto que con escenas como la de "Acertijos en la Obscuridad" donde reaparece el entrañable Gollum con el grande de la actuación del ya experto en "mocap" Andy Serkis, y la batalla final con los trasgos, es que el film se recupera de forma magnifica.

Asi como ver regresar a Serkis un deleite, también ver regresar a Elijah Wood, Ian Holm, Hugo Weaving, Sir Ian McKellen, Cate Blanchett y Christopher Lee en sus respectivos personajes en la trilogía anterior es grandioso en esa divertida reunión en Rivedell que nos recuerda a aquella escena de la asamblea de "La Comunidad del Anillo". Las actuaciones aparte de las de Martin Freeman, sobresale la de Richard Armitage como Thorin Escudo de Roble quienes espero, demuestren un mejor ensamble actoral en el siguiente film.

Con la adaptación que se planea con esta saga entramos en una disyuntiva en concepto de narrativa, si bien aquellos que leemos libros y vemos su adaptaciones cinematográficas con recelo por desechar pasajes entrañables, aunque a veces innecesarios, con la adaptación "El Hobbit" pasara lo contrarío, ya que mientras el fan de la novela quedara complacido, el espectador común ahora encontrara innecesarias algunas escenas y que lamentablemente en este caso si es notable la falla al momento de ampliar demasiado en una historia que bien pudo dar solo para un solo largometraje.

Jackson termina esta primera parte con apenas 6 capítulos abarcados de la novela, y aunque se siente que parece haber llegado a la mitad de la historia, aún falta mucho que ver de la aventura de Bilbo Bolson, Gandalf el Gris y sus enanos compañeros, esperando que la aventura que viene resulte menos tediosa y más dinámica, esperaremos a 2013 para "El Hobbit: La Desolación de Smaug".

CALIFICACIÓN: 7/10